¿Cuándo puede ayudarte la terapia?
- Ansiedad, tristeza, estrés o bloqueo emocional.
- Dificultades en la autoestima, inseguridad o necesidad de control.
- Duelos, rupturas, cambios vitales o sensación de vacío.
- Perfeccionismo, dificultad para poner límites o tomar decisiones.
- Experiencias traumáticas o vivencias difíciles (con un abordaje gradual y seguro).
- Deseo bajo o alto, anorgasmia, dolor sexual o dificultades eréctiles.
- Eyaculación rápida o retrasada.
- Imagen corporal y autoconfianza en la intimidad.
- Uso problemático de pornografía.
- Guiones sexuales rígidos, orientación o identidad sexual.
- Exploración de la sexualidad sin etiquetas ni patologización.
Cuando sientes que algo en ti necesita atención, comprensión o cambio.
Trabajamos contigo en procesos como:
Sexualidad y bienestar
Acompañamos la dimensión sexual desde una mirada respetuosa y libre de juicios: